El proyecto Olinia, una iniciativa que combina capital estatal y privado, avanza con paso firme en la creación de una armadora de autos eléctricos en México. Con tres modelos en desarrollo, este proyecto promete democratizar la movilidad sostenible con precios que oscilarán entre 90,000 y 150,000 pesos, posicionándose como una alternativa accesible en el mercado de vehículos eléctricos.
Puebla se ha consolidado como un punto clave en la fabricación de los vehículos Olinia. La Ciudad Modelo, ubicada en San José Chiapa, emerge como la ubicación ideal para la planta de diseño, ensamble y distribución. Este complejo, que alberga el Centro de Especialización de Recursos Humanos de Alto Nivel (Cerhan), será fundamental para la capacitación técnica y el desarrollo de proyectos tecnológicos vinculados a la electromovilidad.
Recientemente, los coordinadores del proyecto, Roberto Capuano y Rafael Garayoa, realizaron su segunda visita a Puebla para reforzar la colaboración entre autoridades estatales, académicos y representantes federales. Durante el encuentro, se exploraron las instalaciones del Cerhan, que cuenta con laboratorios especializados en mecatrónica, robótica, electromovilidad y más, lo que garantiza un entorno propicio para la innovación.

Sinergias tecnológicas y semiconductores
El desarrollo de Olinia no solo se enfoca en la producción de vehículos, sino que también está vinculado al Centro Nacional de Diseño de Semiconductores «Kutsari», con sedes en Puebla, Jalisco y Sonora. Este centro, que entrará en operaciones en 2027, fortalecerá la cadena de valor de semiconductores, componentes esenciales para la industria automotriz moderna.
La colaboración entre instituciones como la BUAP, el INAOE y el IPN, junto con autoridades estatales y federales, asegura un enfoque integral en la creación de tecnología propia. Este esfuerzo conjunto posiciona a México como un actor relevante en la producción de semiconductores y vehículos eléctricos, marcando un hito en la industria automotriz del país.
Con Olinia, México no solo avanza hacia la movilidad sostenible, sino que también fortalece su capacidad tecnológica y de innovación, ofreciendo una alternativa accesible y amigable con el medio ambiente para los consumidores.